Moraleja

Todos estamos acostumbrados a recibir cantidades ingentes de mails que nos resultan insulsos, más por la abundancia de ellos que por su contenido. Pero el otro día recibí uno que contaban unas historias con moralejas bastante interesantes. Una de ellas decía más o menos así:

Hace ya tiempo cuando un helado costaba mucho menos que en la actualidad, un niño de unos diez años entró en una heladería y se sentó en una mesa. La camarera se acercó y el niño le preguntó:

- ¿Cúanto cuesta un helado de chocolate con almendras?
- Cincuenta pesetas-contestó la camarera con desgana. El pequeño examinó las monedas que llevaba encima y preguntó de nuevo:
- ¿Y un helado solo?

La camarera empezó a impacientarse al darse cuenta que otros clientes esperaban ser atendidos. De forma airada le respondió:
- Treinta y cinco pesetas. Si lo quieres, vale. Y si no, lárgate, que me estás ocupando una mesa.

El niño volvió a contar sus monedas y dijo que quería el helado solo. Una vez consumido, pagó en la caja y se marchó. Cuando la camarera se acercó a la mesa para limpiarla, se quedó asombrada y apenas sin poder tragar saliva de lo que vio. Junto al plato del helado vacío, el niño había dejado su propina: veinticinco pesetas.

Ponedle la moraleja que queráis.

Moda o veracidad

Ocurre una y otra vez: Un asunto se pone "de moda" y acapara las noticias de periódicos e informativos de emisoras de radio y cadenas de televisión. El último caso más claro que recuerdo es el de la famosa gripe A. ¿Cuántos días seguidos nos estuvieron hablando de ella? Nuevos casos cada día, número de fallecidos, medidas para su prevención, etc, etc.

¿Qué pasa? ¿Qué ya se ha erradicado? ¿Qué ya se han curado todos los que estaban enfermos? Sinceramente, no lo entiendo. Ha pasado de ser el tema que abría todos los telediarios, y ocupar gran parte de ellos, a desparecer por completo. ¿Ya no interesa hablar de ella? ¿Existen intereses creados para darle publicidad a algo así en todos los medios?

Me da la impresión de que estamos a expensas de lo que nos quieren contar, incluso yendo un poco más allá, intentar dirigir nuestra opinión en un determinado sentido.

200 años del nacimiento de Chopin

Parece extraño, pero ayer se le olvidó a Evánder poner en las efemérides musicales el nacimiento de Frédéric Chopin, el 1 de marzo de 1810. Y digo extraño porque no se le suelen escapar esas cosas.

Sea como fuere, merece la pena reseñar la fecha. Gracias a mi padre. como contó mi hermano en una ocasión, escuchamos de pequeños mucha música clásica y a mí, que siempre he querido aprender a tocar el piano, me gustaba mucho cuando nos ponía algún disco de Chopin en el viejo tocadiscos. Después compró una cadena musical y cambió los LPs por CDs y todavía sonaban mejor aquellas bellas composiciones. Además, en un viaje que hicimos a Mallorca, ciudad a la que llegó en busca de un clima benigno para su tuberculosis, visitamos su casa y todo lo que allí se conserva de su estancia en la isla.

Es curioso, porque la música que me gusta a mí no tiene nada que ver con esto; pero como suele decirse: "Siempre queda algo".